Jóvcnes, y tampoco tanto, me parece ver a dos. El resto, reunión de jubilatas. Eso sí, bien alimentados. O poco partidarios del ejercicio físico. Desde luego imagen del hambre en Somalia no parecen. Ni tengo la menor intención de que pasen hambre.
Me alegra mucho ver que están bien alimentados.
Cosa que por otra parte ya sabía. Ese no es su problema.
Por cierto la atención obsesivo-compulsiva al móvil en pleno momento de «recreación», raya ya en lo tragicómico; los jubiletas de la «Oh Jesús, qué Compañía» consultando wasaps intrascendentes y videos de youtube absolutamente prescindibles en su rato de «fraternidad comunitaria». No es ésa desde luego la Orden o Congregación a la que vamos a animar a ingresar a nuestros hijos varones. Primero que desaparezca lo actual, que se funde una nueva Compañía de Jesús sobre la base establecida por su fundador y empezaremos a tomarnos en serio a los hijos del gran Iñigo de Loyola.
Estos pérfidos jesuitas no tienen arreglo ni futuro alguno.
La Iglesia, en su más alta representación, también es ahora una república bananera. Triste.
Por desgracia para nosotros, los que usted llamó en su día «propósitos inconfesables» ya no son inconfesables sino horrendos, horribles y horrorosos: cargarse a la Iglesia como sea.
SANTIAGO, totalmente de acuerdo en todo con ud. Pensar que los pobres jesuitas de antaño eran expulsados en los lugares donde sus gobiernos eran masones o/y anticlericales. Un ej. Claro fue en la II REPÚBLICA ESPAÑOLA… Si, se debería refundar la compañía de Jesús y volver a los orígenes. Ay si San Ignacio pudiera hacerles una «visitica»…estaria todos corriendo como en los Sanfermines! , el prepósito actual, el de las grabadoras que no existían en tiempos de Jesús (cínico miserable) sería el primero en llegar arrollando al resto de la pandi… Vergonzoso, indignante, doloroso y un fraude total para la IGLESIA!
Que imagen más decadente………
y como tienen el cuajo de publicarla?????- BompensieroParece que se van a montar en un autobús a Benidormjuan manuel ramilo costas
- Bien repantigados en plan «ahí me las den todas». Y se las van a dar: en 2030 serán cuatro ancianos con pañales, en un asilo, esperando a doña Guadaña.
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