Es la ruina, idiotas!! recesión anunciada y silenciada por cuatreros ZP

La peor cara de la crisis es el paro masivo. Y ha llegado para quedarse pese a los planes de inversión pública. "Suponga que usted debe emplear un trabajador, y que sólo un hombre desea el empleo. Debe pagarle lo que pida. Pero suponga que hay cien hombres, y esos cien quieren ese empleo. Suponga que tienen hijos y que esos hijos tienen hambre. Suponga que una moneda de diez céntimos compra al menos una papilla para esos hijos. Ofrézcales solamente diez céntimos y se matarán unos a otros por conseguir el puesto". La cita es de Las uvas de la ira, el libro de John Steinbeck que describe las penurias de los Joad, una familia de granjeros a los que la Gran Depresión los dejó sin tierra, sin casa y en busca de trabajo. Lo más revelador de la cita es que se escribió en 1939, 10 años después del crash, cuando la tasa de desempleo era aún del 15%. No fueron las obras públicas impulsadas por el new deal del presidente Roosevelt las que hicieron desaparecer el desempleo, sino la II Guerra Mundial, que movilizó a 12 millones de jóvenes. Los Gobiernos apuntan ahora a la misma solución mágica con renovados new deal: inversión y ayudas públicas para paliar la ralentización en la actividad privada. Pero sin una guerra mundial en ciernes, el paro no cederá. Los puestos que se destruyen ahora a toda velocidad pueden tardar mucho en recuperarse, incluso una década.
De ese marasmo laboral nadie está libre, ni los funcionarios. En Argentina, miles de docentes, médicos y empleados de las administraciones de provincias vieron retrasado el pago de sus nóminas. Aquí, los ayuntamientos y las autonomías ya comienzan a sufrir esa asfixia financiera. Los profesores universitarios de Valencia y Madrid ya han denunciado que sus nóminas están en peligro. Las entidades locales se han vuelto las primeras morosas. Las contratas de limpieza, seguridad y otras tardan más de ocho meses en cobrar. Ayuntamientos como el de Madrid han suspendido las obras públicas. En las crisis, los funcionarios están a resguardo. Nadie está seguro en una depresión.

España será uno de los países que lo pasarán peor. La OCDE pronosticó esta semana un retroceso de la economía del 0,9% y un 14% de paro para 2009. En el FMI son aún más catastrofistas. Al sector de la construcción, dado ya por muerto, está a punto de unírsele el del automóvil, que ha activado el eyector laboral con la regulación de 10.000 empleados, y hay quien teme que aprovechen la crisis para desmontar la tienda e irse para siempre.

un simple ejercicio de economía ficción, un género que cuenta con muchos adeptos, a juzgar por algunas afirmaciones. "La crisis de las hipotecas de EE UU no va a afectar de forma importante a la economía española" (José Luis Rodríguez Zapatero, presidente del Gobierno, 22 de agosto de 2007). "En pocos años, entre el 2010 y el 2012 vamos a conseguir en España el pleno empleo" (Jesús Caldera, ministro de Trabajo, 16 de julio de 2007).

Náusea me provoca el recital de sonrisas hirientes y cuidadas papadas que se exhiben en los medios, ignorando premeditadamente el drama de tantos millones de familias cuyos sueños se han desvanecido de la noche a la mañana.

El simposio de flagrante comunión que denotan, maquillado con tintes de políticas antagónicas, políticos de unos y otros partidos, no es más que un circo de redundantes piruetas, vistas ya hasta la saciedad, con el objeto de contener a la masa ciudadana en el limbo mediático, mientras en lujosos y costosos vehículos se desplazan hacia lujosas y costosas propiedades, pagado todo, por supuesto, con el sudor de la frente de todos los españoles. Es allí donde se reparten el botín como vulgares cuatreros, bien encorbatados y acicalados, también con cargo al erario público.


En el mundo de la propiedad privada, si alguien se apropia del bien ajeno, se le denuncia, se le juzga, se le sanciona y se le impide ejercer la misma responsabilidad ¿por qué no exigimos la misma contundencia en el medio público?.

La corrupción no entiende de arrepentimientos. El que delinque de manera voluntaria, es porque está privado de honestidad, de moralidad, bien por educación o bien por naturaleza, pero esto sólo se endereza con privación no con reinserción, pero esta casta siempre sale a flote.

La codicia se adquiere por naturaleza y se alimenta con el hábito, después es huésped del patrimonio moral y finalmente solo puede erradicarse talando a su anfitrión.

Somos nosotros los que permitimos que calienten la silla de su cargo, cuanto más tiempo mejor, afianzados a la teta del estado mientras el país se desmorona. La avaricia hizo mella desde el principio en nuestra democracia, democracia cuyo círculo no se cerrará hasta que tomemos las riendas de nuestro país.

La democracia en España nació ya corrupta. Cientos de politicuchos venidos a menos ya se frotaban las manos tras la muerte del dictador, pensando más en la usurpación que en el bienestar de sus congéneres, y ambiciosamente se enfundaron los guantes blancos para contar el caudal que iba a pasar por sus manos, con actitud de nuevos ricos, pensando en que iban a gastar aquel erario que nunca se acababa. Pero en esta vida, todo se acaba.

Actualmente, muchos piensan que ya hemos salido de otras, y esta no será la última, pues bien, yo le digo, sí será la última, al menos por mi parte, porque lo que es tristemente cierto es que nos aproximamos a una hecatombe de dimensiones desconocidas: hay tantos funcionarios como autónomos, cada tres trabajadores contribuyen a una pensión, en breve llegaremos a cinco millones de parados, cierran miles de pequeñas y medianas empresas, no se concede crédito y, por supuesto el cuerpo funcionarial y político no va a mermar su salario ni su nivel de vida...ya lo dije antes, todo tiene su fin.

El cuerpo funcionarial en su conjunto y el sistema bancario necesita una seria reforma, para empezar, necesitan saber que su existencia depende de la nuestra, que nosotros pagamos su sueldo, simplemente con una insumisión democrática, crediticia y fiscal derrumbaríamos el sistema y ellos lo saben, pero también saben hacer aprovechamiento de la cultura de la manipulación y dificultan nuestra unión.

Barcelona-Madrid de final de liga, por mucho que vitoreemos el partido,
nosotros hemos pagado la entrada y ellos se llevan las tremebundas primas por
haber llegado hasta allí.

En resumen, con corrupción o sin ella, con competencia o sin ella, con
parasitismo o sin él, (aunque en nuestro caso siempre es “con”), mañana será
otro día y la ciudadanía seguirá siendo exprimida en beneficio de unos pocos,
gane quien gane la liga.


Aunque fuera demagogia, que no lo es, por lo menos no la hago con cargo al erario público, como el resto de voceros que cobran barbaries trabajando menos de 120 días al año, si a eso se le puede llamar trabajar. En cualquier caso eres libre de pensar de diferente manera, es un país libre, o eso quieren hacernos creer. Yo tengo claro a quien voté ¿lo tienes tú igual de claro?. Y por cierto, los que han hipotecado a nuestros hijos, no son los padres que han intentado mejorar su vida comprando una vivienda, son los que nos han sumido en la miseria con mentalidades anacrónicas.
Por último, tan culpable es el gobierno como quien le permite gobernar, ahora resulta que el ciudadano de a pie y los pequeños empresarios somos los causantes de la hecatombe, con razón firmas como anónimo, es normal, esto es un infierno de cobardes...

extraido de la web y blogspot lasclasesmedias.blogspot.es y la nacion.es