SIN MAS NOTICIAS DE CARRION Y ESPOSA |
"Las bodas religiosas sin fe", monseñor Novell, que a usted tanto le preocupan, son tan viejas como las propias bodas, en el sentido de que "quien hizo la ley hizo la trampa"; o mejor, en el sentido de que todos somos frágiles, pecadores, necesitados de reforma y de conversión. Aunque lo cierto también es que las bodas religiosas sin fe, como usted las llama -obispo que es usted de Solsona, en Cataluña,
¿No será que muchos dirigentes de la Iglesia católica lo que temen es que la sangría de las deserciones y apostasías no cese, hasta el extremo de llevar a la Iglesia a una rotunda quiebra no solo de fieles sino económica ? Dicho con otras palabras: ¿no será que muchos curas en la Iglesia y hasta obispos no desean ser exigentes para no espantar a muchos que al menos van de vez en cuando a las iglesias y que viven una fe tibia, sí, muy tibia, pero que al menos apoquinan con dinero para el mantenimiento de la Iglesia católica...?
El problema, así pues, en los tiempos que corren es otro, entiendo. Y "ése", el problema, no es otro que el hecho de que los propios obispos, curas, religiosos, religiosas y hasta responsables laicos -no todos, obviamente- han ido rebajando muchísimo el listón del ideal cristiano. Dicho con otras palabras: han preferido muy a menudo promocionar burocracias, que no militancias .
Los resultados están a la vista. De verdad de la buena, ¿cuántos jóvenes matrimonios entre bautizados católicos podríamos decir con justicia que viven auténticamente los valores de la familia cristiana, según la entiende la Iglesia católica? Se contarán con los dedos de la mano y aun así sobrarían dedos.
Incluso entre los fieles bautizados que tienen la enorme dicha de contar con un trabajito gracias a la Iglesia católica (escuela católica, profesorado de Religión católica en la escuela pública, facultades de Teología, técnicos de acción social o sanitaria, etcétera), verdadero tesoro en los tiempos de crisis que corren, es muy difícil encontrarverdaderos testimonios entusiasmantes de vida matrimonial; habría que buscarlos con lupa...
De las generaciones católicas más jóvenes, ¿cuántos fieles bautizados se plantean laapertura generosa a la vida (tener hijos, abiertos a acogerla como un don de Dios), la solidaridad, la espiritualidad conyugal? Éstas, según la doctrina de la Iglesia católica, son las tres patas del edificio de la familia cristiana. No hay que ser ningún lince para percatarse de que al menos en España, en la sociedad española, hasta una mayoría de bautizados que dicen ir de católicos por la vida pero pasan olímpicamente de la doctrina de la Iglesia Católica sobre el matrimonio y la familia cristianos. Repito: incluso los que tienen la enorme dicha de contar con un trabajito gracias a la Iglesia católica -tesoro impagable en los tiempos de dramática crisis que asolan España-, en su inmensa mayoría pasan, según sus obras, los hechos de sus vidas -no juzgo sus conciencias, ni sus voluntades-, de tomarse en serio la exigente doctrina de la Iglesia católica sobre la familia cristiana.
Sería de circo la cosa, de risa, si no produjera sobre todo consternación y pena. Peor para la Iglesia: está cavando su propia tumba, es decir, todo el descrédito posible para ella misma. POR LUIS A. HENRIQUEZ LORENZO
"y pedirle disculpas al Papa y a toda la comunidad católica. Pero ellos deben entender y todo el mundo debe entender que los cubanos no tenemos espacios donde expresarnos".
ResponderEliminar"Debido a eso uno busca un espacio donde ser oído y creo que aquella era una oportunidad que no se podía dejar pasar. No fue mi intención manchar la Misa, así se lo he dicho a varios sacerdotes con los que he hablado y ellos me han entendido. Soy católico y no lo hice con ningún interés de dañar a laIglesia ni a la figura del Papa", agregó.
Sobre sus motivos, el disidente que dijo no pertenecer a ningún partido político, dijo que "tenía una motivación cívica y de principios: los cubanos debíamos hacer algo para que el mundo supiera de las violaciones y los grandes problemas que afrontamos aquí con la libertad de expresión y los derechos humanos. Yo llevaba todo eso desde hacía mucho tiempo por dentro y aquel fue el momento de decirlo".
Carrión contó también que estuvo preso 20 días, que en ese lapso no lo maltrataron físicamente pero lo colocaron en una celda oscura en la que tenía luz solo diez minutos en la mañana y otros diez en la tarde.
Después de 20 días fue liberado y lo hicieron firmar un documento por el que se le limita algunas libertades: "tengo que presentarme todos los miércoles en una unidad de operaciones policiales, no puedo salir del municipio sin pedir permiso, no puedo reunirme con opositores, ni dar entrevistas, no puedo participar en manifestaciones. Pero no he cumplido con casi nada de eso. Ellos no me van a callar de esa forma", indicó.
En la parte final de la entrevista cuenta que aquel 26 de marzo, antes de ir a la Plaza de la Revolución Antonio Maceo, se despidió "de mi madre, de mi hermana, de mi esposa… le dije a ella esa mañana antes de salir hacia la misa 'Te amo mucho'. Yo pensé que no regresaba, pensé que ese iba a ser el último día de mi vida". ORIGINAL EXTR. DE EL PAIS, en vozdesdeeldestierro blog